La terapia asistida con perros es una modalidad de tratamiento terapéutico en que un animal que cumple determinados criterios forma parte integral del proceso. Este tipo de terapia está dirigida por un profesional de la salud quien marca los objetivos específicos del tratamiento. Su propósito es el de fomentar la mejoría en el funcionamiento físico, social, emocional y/o cognitivo de los seres humanos.
Se puede realizar en una amplia gama de contextos y puede llevarse a cabo en grupo o de forma individual. El proceso debe ser documentado y evaluado por el profesional (Tucker, 2004).
Los beneficios son numerosos, de los cuales destacamos: trabajar la empatía, facilitar un canal de comunicación entre el paciente y el terapeuta, favorecer la socialización entre el resto del grupo, estimulación mental y cognitiva, mejorar la concentración, facilitar el contacto físico, aportar beneficios fisiológicos, etc
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